Los días festivos son de alegría, celebración y reflexión. Procuremos que no tengan efectos negativos en nuestra salud.

La ciencia ha avanzado de tal forma, que hoy sabemos que los problemas de deseo sexual en las mujeres, suelen tener un origen hormonal o metabólico que hoy es posible diagnosticar y tratar exitosamente en la mayoría de los casos.

Las agencias internacionales han informado que Dylan Tombides  jugador  australiano del equipo West Ham United  de la liga inglesa, murió víctima de un cáncer de testículo. Siempre resultan dolorosas estas muertes, sobre todo cuando nos damos cuenta que suceden a diario producto de un enorme desconocimiento colectivo sobre el tema.

A raíz de la muerte del jugador Dylan Tombides de la liga inglesa, víctima de un cáncer de testículo, instamos a la población masculina a realizarse el autoexamen testicular. Con un método tan sencillo podemos detectar a tiempo muchas alteraciones testiculares y aquellas masas sospechosas que ameritan una evaluación médica.

En un momento de la historia en que los traplantes representan soluciones viables para problema complejos, surge la inciativa de un equipo de cirujanos al sur del continente africano, quienes han realizado el primer trasplante de pene.

Cuando preguntamos a las parejas cuántas relaciones sexuales mantienen, las respuestas sorprenden: una a dos relaciones por semana a una cada mes concentra la mayoría de las respuestas. Más sorprendente aun resulta que, al preguntar la razón de esa frecuencia de relaciones, la mayoría responde: "no alcanza el tiempo".

La presentación de Vylessi, el nuevo fármaco para el tratamiento de la perdida del deseo sexual en la mujer que están a punto de experimentar la menopausia ha resultado una verdadera sorpresa en el mundo. La comunidad científica se debate sobre su verdadera utilidad y hace hincapié en una serie de detalles a tomar en cuenta.

Soy una mujer recién casada de 24 años. Le aclaro de una vez que nosotros somos muy religiosos, y por eso nunca habíamos tenido relaciones sexuales. Ahora me casé hace un mes, y en lo sexual vamos bien, pero he notado que mi esposo no termina, a él no le sale el semen, salvo que él se estimule con la mano. No sé si es que yo no le gusto, o que él tiene un problema o si es por nuestra inexperiencia.

Soy un hombre separado de 33 años. Soy muy hombre en mis cosas, pero la PANDEMIA me afectó mucho, no sé por qué, pero me puse muy nervioso y por eso solo he salido de mi casa por cosas prioritarias, pero fuera de eso no salgo. Por dicha tengo teletrabajo. Lo que no entiendo es que no tengo relaciones desde que empezó lo del CORONAVIRUS y hace unas dos semanas me salió un brote en el pene que me parece papiloma.

La impotencia suele cursar como un proceso en el cual el hombre va experimentando paulatinamente una pérdida en la erección hasta llegar a la máxima expresión de esta disfunción que es la incapacidad permanente para mantener una relación sexual.

Es claro que aún es temprano para hablar de manera contundente sobre este tema, por eso el presente artículo pretende brindar una visión científica de esta compleja temática.

Decía el sabio Centeno Güell que los miopes ven en los ancianos el pasado, ignorando que en ellos realmente vemos el futuro, si el futuro de uno y cada uno de nosotros, y como tal tenemos que orientar nuestra vida tanto el plano individual como en el plano social, entendiendo que todos llevamos un anciano adentro.

Desde un punto de vista práctico, lo ideal es que el varón esté en capacidad de tener tanto una relación rápida, casi de segundos; como una relación más duradera y plácida, dependiendo de sus deseos o del tiempo que disponga.