¿CON SOLO EL EXAMEN DE SANGRE DE PRÓSTATA ES SUFICIENTE?
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Soy una mujer casada de 54 años. Mi esposo es como todos los hombres, no le gusta ir al médico y nunca se ha hecho el examen de la próstata. Ahora los nietos lo convencieron para que se hiciera el análisis de sangre, y estamos esperando el resultado, pero me queda la duda si con ese examen es suficiente. Esto ha sido una lucha de años, pero como a los nietos sí les hace caso, quiero ver si lo convencemos para hacer todo lo que necesite.
Decían los grandes maestros que la próstata es una embustera, con esto querían decir que esta glándula nos engaña con frecuencia, así es común que, existiendo un problema prostático, uno o varios exámenes salgan normales, generando una falsa tranquilidad tanto al paciente como al médico.
La razón es muy sencilla, la próstata se encuentra ubicada en la parte más profunda de las entrañas de la pelvis, de tal forma que no podemos analizarla en su totalidad con los exámenes usuales, por eso siempre preferimos utilizar diversas pruebas, con el fin de ser más precisos en los diagnósticos.
Así los exámenes iniciales son: el tacto rectal con el cual podemos tocar la próstata y determinar alguna irregularidad o endurecimiento, luego el examen de sangre que nos mide el antígeno prostático específico, que en caso de que esté aumentado nos habla de ciertas alteraciones prostáticas. Además, contamos con el ultrasonido que nos permite ver el tamaño de la próstata, así como la presencia de nódulos o zonas sospechosas, y también como está afectando la función de la vejiga.
En ciertas ocasiones, aun teniendo los tres exámenes, persisten las dudas y entonces procedemos a realizar valoraciones más profundas como el ultrasonido transrectal y la toma de biopsias, que son los que suelen aclararnos casos difíciles. Por todo lo anterior lo ideal es realizar los tres exámenes básicos, tacto rectal, ultrasonido y examen de sangre.